23 de octubre. A unas semanas del inicio del proceso electoral 2020–2021 en Oaxaca, donde se renovarán el congreso local y 153 ayuntamientos regidos por el sistema de partidos políticos, diversos actores, entre ellos los representantes de los institutos políticos ya han puesto en marcha sus estrategias para ganar, aunque tengan que vender su alma al diablo o ser expertos en química, para mezclar el agua con el aceite.
A sólo nueve meses de la jornada electoral el panorama es incierto; lo único que parece estar al margen de dudas es que la elección del año próximo será totalmente distinta de la de 2018, donde Morena y el hoy presidente de la República tuvieron “carro completo”, como lo hiciera el PRI en sus mejores tiempos.
Es bien sabido que el comportamiento del electorado en una elección intermedia es totalmente diferente del de una elección presidencial, y sin duda la diferencia será mayor en los comicios de 2021 porque el presidente López Obrador, que fue quien arrastró el voto de Morena para las demás candidaturas en juego, no estará en la boleta electoral.
Otro factor importante será el hecho de que en la jornada del próximo año concurrirán las elecciones federales con las locales, por lo que el ingrediente local tendrá un peso mucho mayor, y en algunos casos podría ser incluso definitorio.
El mayor reto para Morena será refrendar sus triunfos, principalmente la mayoría en el Congreso federal, ahora sin la figura de Andrés Manuel López Obrador, lo que se antoja por demás complicado, como quedó de manifiesto en los comicios del domingo pasado en Hidalgo y Coahuila, donde el PRI apaleó al hoy partido en el poder.
Lo que más debe preocupar a la dirigencia de Morena es que en la elección de 2018 ese partido había obtenido en Coahuila el 37.36 por ciento de los votos contra el 24.38 por ciento del PRI, y en Hidalgo había apabullado, al obtener el 52.65 por ciento contra sólo el 15.66 del tricolor.
Pero el PRI tampoco debe cantar victoria, pues las victorias en estas dos entidades no necesariamente son reflejo de un buen trabajo político o de la recuperación de la confianza del electorado, ya que también tuvo que ver la desilusión e inconformidad de muchos ciudadanos con respecto de un gobierno que generó altas expectativas pero que no sólo ha quedado a deber, sino que incluso en muchos aspectos ha resultado peor que los anteriores, como lo reflejan los datos duros.
El voto de castigo que fue extraordinariamente bien capitalizado por Morena hace dos años, esta vez podría operar en su contra.
De ninguna manera se debe dejar de lado el factor de las posibles alianzas entre las diversas fuerzas políticas. Algunos partidos ya han venido operando en ese sentido, y no sólo para tratar de lograr acuerdos con sus homólogos, sino también con algunas organizaciones con las que, incluso, han mantenido serias diferencias, como podría ocurrir en Oaxaca con la posible alianza entre el PAN y Antorcha Campesina.
A nivel nacional pareciera que podría conformarse una gran alianza opositora a Morena, aunque Movimiento Ciudadano ha adelantado que esta vez irá solo.
La gran incógnita es el PRI, pues si bien en algunos momentos pareciera que se sumaría al bloque opositor, también ha dado indicios de que podría aliarse ni más ni menos que con Morena, para crear el PRI-MOR.
Y sin duda otro factor importante será la manera en que concluya el proceso para la renovación de la dirigencia nacional del Morena, pues en la contienda interna ha salido a relucir un golpeteo intenso, al más puro estilo del viejo régimen; también tendrá mucho que ver la manera en que se definan las candidaturas en el resto de los partidos.
El mayor reto tanto para el partido del gobierno como para los de oposición será salir de sus procesos internos sin demasiadas heridas y fracturas.
Todo parece indicar que, tras la jornada electoral de 2021, la geografía política del país podría ser totalmente diferente de la actual.
La elección de 2021 en Huajuapan y en el estado de Oaxaca podría dejarnos ver en los próximos meses lo que antes era imposible: que se puedan mezclar el agua y el aceite.