28 de septiembre. A pesar de que las afectaciones que los sismos de los días 7 y 19 de septiembre pasados causaron en las viviendas de Huajuapan y otras localidades de la Mixteca, no se comparan con las que se registraron durante el temblor de 1980, que aunque fue de menor intensidad, provocó mayores daños en las construcciones.
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Y es que a pesar de que las autoridades municipales de Huajuapan han contabilizado más de 2 mil viviendas afectadas por el sismo de 7.1 grados de intensidad en la escala de Richter, ocurrido hace apenas una semana y media, la magnitud de los daños por el de 6.5 grados de intensidad registrado el 24 de octubre de 1980 a las ocho de la mañana con 53 minutos fue mayor.
Miguel Ángel Cárcamo Bello, integrante del Colegio de Arquitectos de Huajuapan, consideró que esto se debe en gran parte a que la calidad de las viviendas ha mejorado, pues en 1980 la mayoría colapsó porque eran construcciones antiguas de adobe y teja, y por falta de supervisión técnica en la construcción de las más recientes. Sin embargo, advirtió que en este aspecto aún existen temas que deben ser analizados por los arquitectos, ingenieros, albañiles y autoridades municipales.
Dijo que tras el temblor del pasado 19 de septiembre se debe contar con un análisis más profundo para la construcción de las viviendas, que incluya mecánica de suelos, cálculos, aplicación de materiales y capacitación de los albañiles.
“Ha habido un cambio importante en Huajuapan. Estamos notando que muchas de las viviendas que han sido dañadas fuertemente eran de las últimas construidas de adobe. El factor importante que hemos notado es la falta de mantenimiento a cada una de las viviendas, ha sido nulo; hay afectación en muros y lozas y creo que es un factor importante la falta de mantenimiento, que también va de la mano con ese daño que se han presentado en cada una de ellas”, comentó.
Cárcamo Bello, expresó que por la experiencia de las evaluaciones realizadas después del sismo del 19 de septiembre, los colegios de ingenieros y arquitectos, y la propia autoridad municipal deben analizar las deficiencias en materia de construcción para mejorar las condiciones de seguridad. También es necesaria la elaboración de un reglamento municipal de construcción, para no depender de los reglamentos de Oaxaca y de la Ciudad de México.
Agregó que a esto se deben sumar la revisión y mejoramiento del Plan de Desarrollo Urbano y la voluntad de los ciudadanos para que al construir sus viviendas cuenten con un plano y los estudios previos necesarios.
“Hay que trabajar muy fuerte en el documento (reglamento de construcción) y que esto no se quede en el papel; esa es una reflexión para nosotros como colegio de arquitectos e ingenieros; tenemos que aportar algo más a la ciudad de Huajuapan. Como arquitectos e ingenieros lo estamos reconociendo en mesas de trabajo que hemos tenido parte de responsabilidad en los errores que se han cometido. Tenemos que capacitar a nuestros albañiles, ahorita es un reto de aquí para adelante, que no se quede en pláticas; buscar los cambios que se tengan que hacer en el reglamento de construcción, que no lo tenemos y hay que hacerlo, porque nos basamos en otros reglamentos, pero a veces no tienen nada que ver con la ciudad de Huajuapan”, dijo.
Expresó que otro problema detectado en algunas de las viviendas afectadas por el sismo es que están ubicadas en asentamientos irregulares o fueron construidas invadiendo áreas federales como barrancas, márgenes de ríos o arroyos. En otros casos los cambios de uso de suelo autorizados en diferentes administraciones se otorgaron sin un sustento, sin un diagnóstico claro para emitir un dictamen.
Mencionó que también se debe mejorar la aplicación de materiales para la construcción, ya que ése es otro factor de afectación a las viviendas por los movimientos telúricos.
“Se tienen que revisar algunos materiales importantes. Ahorita hemos visto que uno de los factores que también influyó es la falla en la fabricación del tabique y block; entonces tenemos que revisar qué debemos mejorar en esos materiales; es una etapa importante, que tenemos que empezar a valorar el material que se aplique, porque a veces nos íbamos con lo que nos decía el proveedor y no hemos tenido esa visión de revisar los materiales, y ésa es una de las consecuencias, por ello tenemos que revisar a detalle los materiales para la construcción”, enfatizó.
Pero este tema no debe quedar sólo en recomendaciones o buenas intenciones, pues también se requiere que las autoridades municipales actúen sin simulaciones y hagan la tarea que otras administraciones dejaron sin hacer.
El director de Obras Públicas del ayuntamiento, Marc Ortiz Galicia, manifestó que entre el sismo de 1980 y el del pasado 19 de septiembre hay una gran diferencia en la construcción, a pesar de ello se debe continuar trabajando en el Plan Municipal de Desarrollo, así como en el reglamento de construcción.
“Para empezar, de esa fecha para acá, hay mucha diferencia; el sismo en aquella ocasión nos agarró por sorpresa porque el tipo de construcción de las viviendas, en su mayoría era de adobe, con teja y otro tipo de cubierta con un sistema constructivo diferente; a partir de esa ocasión se ha ido mejorando, se han aplicado en lo que la misma sociedad ha permitido, el reglamento de construcción del Distrito Federal, del estado de Oaxaca, y ése es el que se aplica para hacer los trámites para dar una licencia de construcción”, explicó.
Ortiz Galicia, aseguró que se debe trabajar en el reglamento de construcción con base en datos reales de la ciudad, para lo que se deben terminar los estudios y proyectos iniciados, además de analizar el cambio de uso de suelo otorgado por administraciones anteriores, para fundamentar técnicamente el crecimiento de la mancha urbana, respetando las zonas federales, barrancas, ríos o arroyos, así como zonas de reserva forestal, a fin de evitar la invasión en zonas de riesgo.
“Es un tema que lo tenemos pendiente (el reglamento de construcción). Cada caso de cada ciudad es muy diferente; aquí ya se habían hecho unos estudios preliminares con gente especializada, pero realmente falta concluirlos porque tenemos que hacer estudios de los diferentes tipos de suelo que hay en la ciudad, en algunos lugares donde se hicieron sondeos que en otro tiempo eran río y fueron rellenos; son áreas invadidas, pero debemos tener esos antecedentes, y eso nos obliga a tener un estudio de toda la ciudad”, mencionó.
El funcionario explicó que en cada colonia o agencia de Huajuapan existen diferentes tipos de suelo, por lo que es necesario contar con un estudio y con el reglamento de construcción.
Ortiz Galicia dijo que durante los recorridos realizados a las viviendas afectadas por el sismo del 19 de septiembre se detectó que los daños que la mayoría sufrió se deben principalmente al terreno donde se ubican, o a fallas en la ejecución de la obra, aunque en otros casos a la misma intensidad del temblor.
Mencionó que las zonas más afectadas son el fraccionamiento Los Naranjos, las colonias Los Pinos, El Rosario y Antonio de León, así como la agencia El Carmen, principalmente.
Aseguró que como director de Obras Públicas ha exigido la ejecución de obras con calidad, sobre todo porque las escuelas, los techados y edificios públicos, entre otras, deber servir como refugio temporal para brindar atención a la sociedad ante una contingencia.
“Sigue que a partir de este momento que ya tenemos un reporte de más de 2 mil viviendas afectadas con daños menores y mayores, tenemos que hacer un mapa donde se registre exactamente cómo está resultando la ciudad, por qué falló , por qué tuvo problemas, y es ahí donde nos vamos a dar cuenta si son por condiciones económicas, de tipo de suelo, de procesos de construcción, eso nos va a determinar qué procedimiento vamos a seguir para las zonas que ya están habitadas, en las cuales tenemos que actuar; en las zonas que no están habitadas tenemos que decir dónde sufrimos más daños y qué medidas precautorias debemos tomar, además de realizar una revisión del Plan de Desarrollo Municipal, apegado con una zonificación de tipo de suelo para determinar dónde podemos crecer, dónde no, y bajo qué condiciones”, sentenció.
El presidente del Colegio de Arquitecto delegación Huajuapan, Víctor Vargas, agregó que otro factor que provocó afectaciones en viviendas, es que no se respetaron los límites de construcción entre una y otra.
“Sí, se hace notoria esa falta de los cinco centímetros de separación de cada colindante, ya que en su momento se aprecia que tuvieron un choque entre cada construcción vecina”, comentó.
Por esos problemas ya detectados por el Colegio de Arquitectos y por las autoridades municipales es importante que las áreas técnicas del ayuntamiento y los integrantes del Cabildo hagan su tarea y cuanto antes Huajuapan cuente con reglamentos que sean verdaderos instrumento para evitar que continúe la edificación de viviendas en zonas de riesgo, o que la construcción de las mismas no se ajuste a las normas que se requieren en una zona eminentemente sísmica como es ésta.
En menos de un siglo Huajuapan ha sufrido los efectos devastadores de dos sismos de gran magnitud; por eso es tiempo de que autoridades, técnicos y ciudadanos hagamos la tarea pendiente, para garantizar lo más importante: la seguridad de las personas y de su patrimonio.
– Gerardo Cruz
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