La música, el arte de las musas

R E P O R T A J E

Denise Luengas

20 de noviembre. Este domingo se celebrará en el mundo cristiano el día de la mártir Santa Cecilia, quien en el año 1594 fue declarada por el papa Gregorio XIII "Patrona de los Músicos".

El motivo por el que le fue otorgado este título es incierto, pues existen varias versiones al respecto, algunas incluso contradictorias.

Una de estas versiones indica que el día de su boda (acordada por sus padres como era la costumbre de la época), ella se dedicó internamente a cantar a Dios mientras los músicos tocaban. Otra versión, tomada de las "Actas de Martirio de Santa Cecilia" señala que mientras era torturada por causa de su fe cristiana, "Cecilia cantaba al Señor".

Por su parte, el papa Gregorio XIII justificó el nombramiento diciendo que Cecilia había “demostrado una atracción irresistible hacia los acordes melodiosos de los instrumentos. Su espíritu sensible y apasionado por este arte convirtió así su nombre en símbolo de la música”.

Sea cual fuere el motivo, desde el siglo XVI y hasta nuestros días esta celebración se ha mantenido, y los músicos de todo el mundo reconocen a la mártir cristiana como su Santa Patrona.

Huajuapan y la Mixteca no son la excepción. Herederas de una amplia tradición musical, en esta ciudad y en la región esta celebración es de particular importancia para quienes han sucumbido ante el llamado de las musas, las diosas de la mitología griega inspiradoras de la música.

La celebración del Día del Músico brinda la oportunidad a los músicos y a quienes no lo son pero disfrutan de este sublime arte, de regresar el reloj hasta mediados del siglo pasado, para recordar a algunos de quienes forjaron la historia musical de Huajuapan.

Un nombre que viene a la memoria de inmediato es de los Hermanos Herrera, quienes integraron una orquesta de cuerdas que se convirtió en infaltable, tanto en eventos sociales como actividades cívicas y religiosas.

Hacia la década de los setenta, una segunda generación, integrada principalmente por los hijos de los iniciadores de esta orquesta, modificó el concepto y se adaptó a los requerimientos de los nuevos tiempo, incorporando instrumentos electrónicos y un repertorio variado pero en el que predominaban las canciones del momento.

Otro de los grupos musicales que hicieron época y que tenía su base en los integrantes de una familia fue el que formó el profesor Bonfilio Trujano aproximadamente en 1970, con el nombre de "Tropical Ipacaraí", que después cambió su nombre por el de "Polifonía 21" de los Hermanos Trujano y más tarde por el de "Los Bambinos".

Manuel Trujano Morales, uno de sus integrantes con más de 40 años como músico y actualmente representante de "Manolo y sus Teclados", asegura que "Polifonía 21" protagonizó una etapa importante de la música local, alternando con grupos como "Los Hermanos Herrera", "Los Astros" y "Convoy", entre otros.

"Los Astros" fue otro de los grupos que en aquella época amenizaban los eventos sociales, los bailes y las tradicionales "tocadas" juveniles denominadas "tardeadas" que se realizaban en el CCH (un salón de fiestas ubicado en la primera curva de la calle 5 de febrero, frente a donde hoy se ubica el fraccionamiento Villa de los Angeles), así como en la Preparatoria 3, en el Hotel "Yuli", en el patio del domicilio ubicado en la calle Constitución 18, e incluso en el patio del antiguo Palacio Municipal.

Florencio Gómez García, fundador de "Los Astros" y actualmente director de "García Coros y Orquesta", se refiere a los inicios de este grupo:

“La historia empieza desde 1973, cuando hicimos el primer grupo que se llamó Los Astros. Hubo varias épocas; luego fueron Los Novel’s en el 76, una vez más Los Astros en los 80’s hasta por el 91-92 luego el grupo Corazones 111, Corazones por el Señor de los Corazones y 111 por el sitio de Huajuapan; y de allí otro grupo que se llama Remembranza porque tocamos música viejita de Los Pasteles Verdes y Ángeles Negros, y actualmente con esta orquesta que toca música de Ray Conniff”.

Gómez García empezó su historia en la música desde que estaba en sexto año de primaria; posteriormente ingresó a la estudiantina y dese ese momento supo que la música era su vocación y pasión en la vida.

La música le permitió viajar a otras entidades: en la ciudad de México participó en el grupo "La Parquita", ente otros. Además, en la estación de radio La K-buena, en el programa "Salsa Cambiando con Paco Morán", sonó la canción de su autoría "Trágico Amor", a ritmo de Cumbia. También por la música viajó a Tijuana y a algunas ciudades de la Unión Americana.

Por su parte, Juan de Dios Humberto Espinosa Hernández quien fue integrante de "Los Hermanos Herrera", de "Los Astros" y de otros grupos locales, recuerda:

“Yo inicie en el año 71, 72 con el grupo de los Hermanos Herrera; posteriormente formamos el grupo de Los Astros, duramos como dos tres años, pero cada quien tomó su rumbo, y de allí en adelante se formaron grupos locales como el grupo de Los Gitanos, posteriormente vino el grupo de los Corazones 111, muchos grupos, ahora no sé qué grupos habrá…  “Éramos versátiles, tocábamos desde un danzón, chachachá, hasta una cumbia, porque antes no se escuchaba otro género como la duranguense, la banda era muy poco y era otra música de banda, no como ahora,”.

También tocaban rock clásico de la época de los 70, temas de los Teen Tops y Los Rebeldes del Rock, entre otros, y había una fuerte pero sana competencia con los otros grupos locales.

“Cuando yo estaba con Los Astros estaban Los Hermanos Herrera, la orquesta de los hermanos Trujano que se llamaba Polifonía 21, posteriormente vino un grupo de fuera que se llamaba "Clap-Clap", y entre ellos y nosotros, Los Astros, estaba dura la competencia y en las famosas tardeas nos agarrábamos duro cada quien con su estilo”, dijo.

Entre los grupos locales de las décadas de los 70 y 80 se recuerda también a los Juver’s, a los Kider´s y a Los Gitanos, por mencionaron sólo algunos.

Con el paso de los años no sólo han proliferado los grupos musicales, sino que han cambiado muchas cosas:

“Antes no teníamos una apoderado ni alguien que nos representara como los grupos de ahora que usan infinidad de equipos , audio, iluminación, tarimas, escenario, antes en el vil suelo y unos cuantos focos que nos alumbraban y a tocarle”, refiere Florencio Gómez.

Por su parte, Manuel Trujano menciona que actualmente ya no se puede vivir sólo de la música, por el exceso de competencia:

“Yo lo veo casi imposible, yo me dedico por ejemplo al negocio de la lavandería, que me da la base, y ya la música es como un extra, aunque la música es lo que más me gusta. Antes erramos solo unos cuatro grupos y en épocas fuertes ya no queríamos tocar, ya no queríamos queso sino salir de la ratonera”, dijo.

Otro de los problemas que refiere Florencio Gómez es el de la falta de apoyo por parte de las autoridades.

“Definitivamente no hay apoyo. En algunas ocasiones que llegamos a tener contratos con personas o dependencias o municipios, son fuera de Huajuapan, como Acatlán, porque en esta ciudad no ha existido apoyo para la Cultura. Deberían ver este apoyo para la cultura y el arte, que hay muy buen nivel en la ciudad, porque mientras no haya apoyo se pierde esto, pues prefieren irse a otros lados a trabajar…En Huajuapan existe mucho malinchismo, he solicitado en la feria para que estemos en el teatro principal y sucede que no existe esa oportunidad, hay gente de fuera que cobra un dineral y a nosotros nos hacen un lado, hacemos un buen papel“, dijo.

La música tradicional enfrenta una problemática especial en las comunidades de la Mixteca. El jefe de la Unidad Regional Huajuapan de Culturas Populares, Guillermo Círigo Villagómez, aseguró que hay instrumentos pero no tienen quien los toque porque no hay maestros

“Para Culturas populares entre los grupos musicales no solo estamos considerando a las bandas de viento, también a los grupos de música típica. Las bandas de viento son una expresión cultural ,un grupo que se ha impulsado en el estado de Oaxaca no solo por Culturas Populares, muchas instituciones tienen programas para apoyar a las bandas de viento, pero consideramos que un punto débil es la capacitación”, dijo.

El Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC) ha realizado diversas acciones para apoyar estas expresiones musicales. Abundo que hoy en día las bandas son grupos que se están conservando, no así las orquestas tradicionales.

“Lo que es preocupante es la desaparición de los grupos de cuerda, las orquestas tradicionales. Por lo menos en esta zona baja de la Mixteca podemos ver que está la orquesta La Tezoateca, y recientemente con un apoyo de PACMyC se acaba nuevamente de integrar con una dotación completa la Santa Cecilia de Tequixtepec. Son pocas orquestas típicas; las mismas autoridades municipales están preocupadas por la continuidad de bandas musicales, pero también es importante trabajar en el tema de la conservación y la capacitación para que se continúen preservando los grupos de cuerdas, las orquestas típicas”, dijo.

Aseguró que es importante no solamente el grupo como tal sino la función social que desarrollan.

“A veces decimos que las bandas son el alma del pueblo y hay que conservarlas por ser parte de la tradición pero también hay que revisar si esos grupos musicales están cumpliendo la función social para lo que originalmente fueron creadas, es decir que den los servicios comunitarios, la participación en las fiestas, en los actos cívicos, acompañar a los difuntos, porque muchas veces las organizaciones musicales, lo que interpretan es música de otras regiones; entonces son bandas de viento que tocan música comercial y dejan de lado la música de la región como los sones, las chilenas, las marchas, los boleros. Lo importante de festejar a Santa Cecilia es apoyar a la comunidad y viceversa, y entonces tendrá sentido esta celebración”, dijo.

En relación con el festejo del Día del Músico, Florencio Gómez dijo:

“Solamente nosotros nos reconocemos con nuestra labor que hacemos y entre nosotros nos organizamos porque nadie se acuerda del Día del Músico, estamos hablando de las autoridades, porque se recuerdan otros eventos pero al músico pasa desapercibido… Creo que si hubiera más músicos pensáramos más en el arte habría menos delitos, delincuencia y terrorismo”.

¿A quién no le gusta la música? Es raro escuchar que alguien diga que no le gusta escuchar música, independientemente de sus preferencias en cuanto a géneros e intérpretes. La música nos acompaña en los momentos más importantes de la vida: cuando nacemos, cuando celebramos un acontecimiento especial, y hasta cuando morimos. Escuchamos música cuando estamos con amigos y cuando estamos solos; cuando estamos alegres y cuando la tristeza nos invade; cuando vivimos la plenitud del amor y cuando padecemos el flagelo del desamor.

Por eso este domingo, Día de Santa Cecilia, patrona de los músicos, es una oportunidad propicia para recordar y reconocer a quienes han escrito y a quienes siguen escribiendo la historia musical de Huajuapan y la Mixteca; a quienes plasmaron en el papel pautado ideas y sentimientos, a quienes les dieron vida y los recrearon al interpretarlos: a los músicos, que nos endulzan los oídos y nos transmiten un mundo de sensaciones a través de los sonidos que dan cuerpo al más universal de los lenguajes, al lenguaje del alma: la música.