Gerardo Cruz
22 de marzo. El Patronato de la Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública, otorgará 10 sillas de rueda con un valor aproximado de nueve mil pesos cada una, gestión realizada por el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) municipal encabezado por Guadalupe Palma de Círigo.
Palma de Círigo, informó que una primera etapa es dotar de una silla de rueda de uso diaria a 10 personas con discapacidad, los cuales son atendidos en la Unidad Básica de Rehabilitación (UBR), originarios de Huajuapan, San Andrés Dinicuiti y Tamazulapan Villa del Progreso, entre otros.
“Acudimos ante la beneficencia pública para que nos apoye con 10 sillas especiales de uso diario, para que jóvenes, hombres y mujeres tengan un mejor desarrollo en sus actividades diarias”, dijo.
Areli Barroso Pérez, directora del Patronato de la Administración del Patrimonio de la Beneficencia Pública, dijo que esta acción fue ordenada por del Gobernador del Estado, Gabino Cué Monteagudo y Germán Tenorio Vasconcelos, titular de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
“Venimos a dotar de beneficios a las personas discapacitadas para mejorar su desempeño y calidad de vida, donde cada silla de rueda de uso diario se va a adecuar a la lesión de cada persona, donde cada silla esta adecuada de acuerdo a las medidas de cada beneficiario”, enfatizó.
Finalmente dijo que con estas sillas de rueda pretenden impulsar el proyecto de conformar un equipo de basquetbol impulsado por el DIF municipal, ya que las sillas tienen la movilidad para este deporte.
tomado de:
Universidad de La Habana
Facultad de Psicología
Cátedra de Estudios sobre Discapacidad
Uso correcto del lenguaje referido a las personas con discapacidad
Discapacitados, no: Personas con discapacidad
Dannae Palacios Ortiz
lo correcto es:
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), deficiencia es toda pérdida o alteración de una estructura o función psicológica, fisiológica o anatómica. Una persona puede, por tanto, tener deficiencia visual, deficiencia auditiva, pero es preferible evitar el calificativo deficiente. Resulta lesivo para otro ser humano ser definido por sus pérdidas, aún más teniendo en cuenta que la discapacidad no constituye enfermedad.
La OMS considera la discapacidad como toda restricción o ausencia debida a una dificultad de la capacidad para realizar una actividad dentro del margen que se considera normal para un ser humano. Al igual que en el caso de la deficiencia, un hombre o una mujer pueden tener discapacidad (físico-motora, auditiva, visual, intelectual) pero no son «discapacitados», menos aún «incapacitados». Ellos y ellas no son sus discapacidades, sino son ante todo personas muy capaces de vivir plenamente, como cualquier otra, con la particularidad de poseer una discapacidad.